Arañas

Arranqué arañas de mi cabello,
cuando la tarde me daba un aire envilecido,
cuando la palidez era el bastón de la nada.

Habría sido mejor desprenderte de las hojas,
de la ventana roída por la neblina,
o desenredar distancias y tiempos.
Habría sido mejor tropezar con tus manos,
con el infinito tras tu voz.
Habría sido mejor arrancarte de mi cabello,
y que fueran arañas las que se posen en la ausencia.

Habría sido mejor encontrarte tras una puerta,
y que fuera otro el poema que se cae de mi boca.

2 comentarios:

Rafael Caruzo dijo...

Mae muy tuanis... este poema.. bastante emo.. jaja pero muy chiva. me gusta la metafora de las arañas con los recuerdos, con eso que uno quiere olvidar.

Anónimo dijo...

Nostálgico y muy cierto