He tenido el valor, Apollinaire

He tenido el valor de mirar hacia atrás
Los cadáveres de mis días
Marcan mi ruta y lloro
Unos se pudren en las iglesias italianas
O en pequeños bosques de limoneros
Que florecen y marchitan
Al mismo tiempo y en toda estación
Otros días han llorado antes de morir en las tabernas
Donde ardientes ramilletes giraban
En los ojos de una mulata que inventaba la poesía
Y las rosas de la electricidad se abren todavía
En el jardín de mi memoria

2 comentarios:

guisela vargas dijo...

me deja un buen sabor de boca, este poema..un gusto pasar por aca
lapuntadelicebergcr.blogspot.com

José P. M dijo...

Bello poema, es un placer conocer tu casa. Sin duda no será la única visita...

José P.